tag:blogger.com,1999:blog-34159132.post116298827334611775..comments2023-11-03T14:36:54.045+01:00Comments on La Dulce Luna: ...cuánto bien puede hacer un buen profesor y....cuánto mal...un profesor pésimoLa Dulce Lunahttp://www.blogger.com/profile/15591246536296675386noreply@blogger.comBlogger1125tag:blogger.com,1999:blog-34159132.post-1163009259338140072006-11-08T19:07:00.000+01:002006-11-08T19:07:00.000+01:00Soy profesora y tutora y aunque sólo llevo dedicad...Soy profesora y tutora y aunque sólo llevo dedicada a la enseñanza 13 años los alumnos me han ido enseñando a ser lo que hoy soy. Una cosa tengo clara cuando accedo a un aula, mis alumnos ante todo son personas, después estudiantes.Podré enseñar mejor o peor mis áridas materias, pero gracias a Dios todos los días me acuesto tranquila sabiendo que he ayudado a esa persona que necesitaba de mí, que la he escuchado, que le he dado un abrazo (porque ese día era lo que necesitaba), que le he dicho lo mucho que la quiero y que confío en ella, que sabe que estoy para lo bueno y lo malo, que...<BR/>Porque quizás esté equivocada (algunos compañeros me lo echan en cara)pero ser profesor o maestro o tutor es principalmente enseñarles a valorar las pequeñas cosas de la vida, el temario viene después (para algunos terminar o no temario es la meta del año escolar).<BR/>Cada año nos enfrentamos a una nueva mudanza, nuevos alumnos, nuevos temarios, nuevo curso, nuevos compañeros; pero ante todo nos enfrentamos a una nueva ilusión, a un nuevo curso por enseñar, conocer, valorar e incluso aprender de nuestros alumnos.<BR/>Soy sincera, amo mi trabajo, me encanta la enseñanza, me encanta estar en contacto con los alumnos.<BR/>Que hay días buenos, regulares o malos, sí lo asumo, como los tenemos en nuestra vida particular. Y ahí está el encanto de la enseñanza: en vivir el día a día, en aprender siempre de lo bueno y lo malo, en valorar los pequeños detalles y los mínimos gestos . En definitiva, en ser ante todo personas y saber tratar a nuestros alumnos como son: personas con sus defectos y virtudes, con sus problemas y con sus adolescencias.<BR/>Detrás de un mal gesto o una mala mirada o un pésimo comportamiento, siempre hay un alumno reclamándonos su atención , un alumno con un problema personal.El educador que no lo vea, o no le interesa el alumnado o realmente aún le quedan muchos años por aprender cual es el valor de la enseñanza.<BR/>A veces exigimos madurez a nuestros alumnos, cuando no nos comportamos como tal nosotros; les pedimos ser ordenados, puntuales, que vistan correctamente y no nos fijamos en el mal ejemplo que nosotros estamos dando.Les pedimos que hagan sus tareas diarias, que estudien, y nosotros mismos somos los primeros que tardamos 15 dias en entregarles un examen corregido o en no prepararnos la clase un día determinado.<BR/>Puedes pedir, cuando das; puedes exigir cuando tú mismo te exiges.En definitiva, ser profesor o ser padres no es tarea fácil, no hay manuales, se aprende día a día.Anonymousnoreply@blogger.com